Les quiero contar que en el mes de mayo el mercado de Constitución se prendió fuego, yo tenía mi negocio (la peluquería) y quedé sin nada…El incendio se provocó, no sé cómo porque aún no se ha llevado a cabo la investigación.
La verdad es que perdí todo, pero gracias a Dios, Él me abrió una puerta, y lo que nunca perdí fue la fe. Le doy gracias a Noelia A. por apoyarme siempre, y a las hermanas, que sin ellas no lo podría lograr. ¡Gracias a Dios! Una vez más me levantaron, me ayudaron, me enseñaron el camino, me dieron una mano para volver a caminar y ahora puedo comenzar de nuevo, con poco, pero lo voy a lograr de nuevo. 
Una de las cosas que también aprendí es que el que se cae una vez y se levanta, no importa las veces que se caiga siempre hay que levantarse.
Le doy gracias a Dios porque he tenido amigos que me han apoyado, he pasado muchas, gracias a Dios, mi madre a la distancia me ha apoyado con su aliento.
Perdí todo, saben como yo luché para lograr lo que tenía y como me dediqué, al perderlo todo… lo único que no perdí fue la esperanza. Y si Dios me abrió la puerta de nuevo fue para seguir luchando, les digo a muchas mujeres que sigan adelante y si se caen una vez, o dos veces, levántense porque siempre al final del túnel hay una luz, y eso es lo único que nunca voy a perder, es la fe en Dios.
Gracias a Dios, gracias a ustedes, las quiero, las amo.

Adolfa

0 comentarios

Deja una respuesta

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *